Revolución Social: La lucha no violenta

Los golpes de estado, los ataques terroristas, las guerras convencionales o inclusive el uso de las armas de destrucción masiva son formas de luchar por el poder político. Pero hay otro camino: el de la lucha estratégica no violenta.

Muchos hablan de la lucha civil no violenta, pero pocos realmente entienden de lo que se trata. Para entender la lucha estratégica no violenta primero hay que entender la naturaleza del poder político. Tras entender los modelos, la naturaleza y las fuentes del poder político, hay que entender las organizaciones y las instituciones a través de las que ese poder se ejerce. Al final descubriremos que en el mismo centro del poder político está el concepto de la obediencia y comprenderemos que si el pueblo no obedece, el gobernante no puede gobernar.



En 53 de las 69 transiciones a la democracia durante los últimos 40 años, la resistencia civil no violenta ha sido un factor fundamental. Además, cuando los movimientos opositores utilizaron la resistencia no violenta, la transición arrojó resultados de mayor libertad y justicia para esas sociedades; mientras que los movimientos opositores que recurrieron a la violencia para lograr la transición, redujeron enormemente las posibilidades de construir democracias sostenibles.

En conclusión, se puede decir que la lucha no violenta, no solamente es una alternativa realista al uso de la violencia, sino que además la experiencia ha mostrado que los cambios sociales obtenidos pueden producir soluciones más positivas y duraderas.

Estos movimientos articulados de forma abierta son los únicos susceptibles de cambiar la sociedad de forma noviolenta, positiva y duradera. Movimientos inclusivos en lugar de exclusivos. Movimientos mayoritarios en lugar de minoritarios. Movimientos basados en la participación en lugar de la exclusión.



Martin Luther King luchaba por los derechos de sus comunidad, sin hacer distinciones si eran de izquierdas o derechas. Ghandi luchaba por la descolonización de la India. Nelson Mandela por el fin del apartheid y la construcción de una Sudafrica en la que cupieran negros y blancos.



Pero en la ultraperiférica patria, parece que el día que explicaban esto en la clase de introducción al activismo los muchachos "hicieron argolla" y fueron a jugar al boliche. No se trata de ideologias se trata de personas. No se trata de discutir, se trata de hacer. No se trata de dividir, se trata de unir. No se trata de liderar, sino de dejar que los demas ejerzan su propio liderazgo. Se trata de construir un futuro, de alcanzar una meta entre todos.


Pero una cosa es rechazar jerarquias cerradas y otra es la falta de estructura, organización y liderazgo. Los movimientos nunca surgen de forma expontanea.

Comentarios

  1. Te recuerdo que Mandela no era, es, precisamente un pacifista al estilo de Ghandi. Estaba por la lucha armada. Por otro lado cuando hablas de mayores cotas de libertad en las transiciones pacíficas me gustaría saber a cuales te refieres, por lo menos una muestra. También, y a ese respecto, recuerdo el caso de Nicaragua, donde después de una guerra cruenta y larga entre el FSLN y los Somoza se consiguó llegar a una democracia impecable, a pesar de la "contra". El problema, para mí, no está en las formas, sino en los fondos. Si quienes ganan la guerra son revolucionarios y demócratas de verdad o no.

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  2. Gnadhi tampoco era un pacifista. Esa es una de las falsas ideas que hay que desmontar. Muchos han deformado la figura de Gandhi, en quien se ha visto muy a menudo a un santo, sin ver a un estratega.

    La noviolencia gandhiana coge de las tradiciones religiosas orientales el principio del respeto a la vida, pero es completamente de inspiración occidental: la noviolencia no invita a la meditación fuera de los conflictos, sino a la lucha ofensiva contra la injusticia.

    Gandhi incluso participo en un guerra en Sudafrica, porque la participación en la guerra permitiria a los indues adquirir ciertos derechos.

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  3. Carolus, estadisticamente se da na relacion significativa entre la lucha no violenta y la calidad democratica a posteriori.

    Eso es lo que dicen los datos disponibles. Lo otro son creencias, mentalidades y percepciones personales que pueden estar equivocadas o no.

    Que exista una relacion entre calidad democratica y lucha no violenta no significa que no puedan haber excepciones en un camino u otro.

    Un ejemplo de lucha no violenta que no creo calidad democratica la tenemos en la India. El ejemplo que pones sobre Nicaragua no lo conozco y por tanto no puedo opinar.

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  4. Mandela estuvo por la resitencia no violenta y solo como ultimo recurso al ver que esta no terminaba desestabilizando al regimen opto por una campaña de bombas en sitios estrategicos pero no orientado a causar victimas.

    Pero despues volvio a la lucha no violenta.

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