Leyenda Negra o Leyenda Rosa


Es curioso como el poder tiene la capacidad de construir, dirigir y redirigir narrativas para autojustificarse. Uno de los ejemplos más claros es La Leyenda Negra de España.

Ante las barbaridades cometidas por los españoles cualquier crítica es obra de una supuesta Leyenda Negra que elaboraron los enemigos de España para atacarla. Cualquier dato que contradiga la narrativa nacionalcatólica y el mito de la hermandad en la Hispanidad es parte de una propaganda antiespañola, hispanofóbica y anticatólica que no reconoce la magna obra hecha por España en América y otros lugares. Una obra fruto de una unidad de destino en lo universal como rezaba el lema franquista. Y así de la Leyenda Negra pasamos a la Leyenda Rosa.

La Leyenda Rosa exalta la obra histórica de España en América, presentándola como una empresa civilizadora altruista, protectora de los pueblos indígenas y portadora de la religión y la cultura. Por eso se niega cualquier exceso cometido en América o Canarias, o se quiere justificar como una típica “acción de guerra”.

Esta visión fue promovida por el poder, especialmente durante el régimen franquista, como una respuesta a la leyenda negra, promoviendo un patriotismo y una exaltación de la empresa americana. Fue un ingrediente y soporte esencial del nacionalcatolicismo, rico en símbolos, imágenes y referencias que con el tiempo arraigarían en la conciencia popular. En este sentido, la Hispanidad —mito y doctrina— fue uno de los más potentes instrumentos de nacionalización y socialización de la Dictadura.

Y es que la idea de España va unida inexorablemente al catolicismo, y el catolicismo se basa en la “culpa”. Por eso la Leyenda Rosa de la Hispanidad cumple una función crucial… evitar la culpa. Para evitar la culpa hay que blanquear la historia.

Y así surgen una serie de mitos completamente falsos, la colonización inglesa fue peor porque exterminaron a los indios en norteamerica. Exterminaron a los indios, clama el españolito vil… como si los españoles no hubieran intentado hacer lo mismo con los tainos en el Caribe y con los guanches en Canarias.

No solo ignora que eso no lo hicieron los ingleses sino los norteamericanos, que en Canadá que si pertenece al Imperio Británico los tratados con las First Nations si se respetaron y que la herencia cultural inglesa es infinitamente superior a la herencia cultural toxica hispana.

Los españoles respetaron las culturas indígenas y no como los ingleses también dicen- Falso otra vez. Los ingleses normalmente practicaron lo que se llamaba gobierno indirecto. Un sistema de gobierno utilizado por el imperio colonial británico para controlar partes de sus extensos territorios, particularmente en África y Asia, a través de estructuras de poder indígenas preexistentes. Es decir explotaron económicamente pero respetaron las culturas.

La colonización española y francesa fue distinta, se basaba en la asimilación. Es decir en destruir la cultura y el sistema de creencias, forzando la conversión al catolicismo y usando la culpa. Esta colonización no solo destruye la cultura sino que destruye el alma. Y la asimilación nunca es posible porque el europeo nunca va a ver en el panchito un igual, ni en el canario ni en un negro, ni en un moro. Siempre los considerará, como mínimo, un escalón inferior.

Si existen etnias y culturas nativas en America no es por la humanidad de los españoles, es que simplemente el bocado era demasiado grande. La corona no podía llegar a todos los valles andinos, ni a lo profundo de la selva amazonica, el territorio era demasiado extenso, el aparato del Estado limitado y la élite española una minoría frente a la población indígena lo mismo que los británicos eran una minoría frente a la población de la India.

En cambio, cuando el bocado era pequeño cometieron genocidio como en el Caribe y en Canarias. Y si, hubo genocidio taino y canario pero no exterminio total. Alguien tenia que hacer las camas, cortar la caña de azúcar o drenar pantanos, y soldados para usar como carne de cañón en otras conquistas.

Pero el español lo que quiere y necesita es evitar la culpa, la culpa de ser mala persona, de ser mal cristiano. Por eso cuando le recriminas sobre la conquista de Canarias te dice que tu eres español y no guanche,.. así evita la culpa. O te dice que es mentira y te sale con la Leyenda Rosa, o te dice que esa cosas pasaron hace mucho siglos que a el que le cuentas – ignorando que eso se hizo en nombre de su rey, su patria y su religión- o que sin la protección de España Marruecos nos va a invadir. Cualquier argumento, por estúpido que sea, que le permita evitar la culpa y mirar para otro lado. Y así el españolito al hablar de los guanches pasa de “España fue el mejor colonizador, civilizó cristianamente y no como los ingleses que los mataron a todos” al “a los guanches los mataron a todos” según le interese.

Entonces, ¿hay Leyenda Rosa? Sí, sin duda. ¿Y hay Leyenda Negra? No, no es leyenda negra es realidad. En Canarias y en el Caribe hubo genocidio y etnocido, hubo uso deliberado del terror.

Ah, pero eso no fueron los Reyes Católicos que eran tan buenos y protegían a los indios y a los guanches. Esos desmanes los hicieron personas, no la corona. La conquista de América y Canarias se hizo por iniciativa privada en nombre de Castilla. Falso otra vez. La isla de Gran Canaria sufrió uno de los mayores genocidios de la conquista y fue una empresa directa de la corona de Castilla. Fue promovida directamente por los Reyes Católicos y financiada a través de bulas papales e indulgencias directamente por la Iglesia.

Pero de esto no se quiere hablar. En este juego de manipular narrativas el poder tiene una aliado perfecto en Canarias, las universidades y el progre-simplón postmoderno, muchas veces cristiano de base. En su relato y manipulación política de la imagen del guanche, en lugar del genocidio, en lugar de las desigualdades de la sociedad colonial, el prefiere fijarse, destacar y magnificar las diferencias sociales y la estratificación de la sociedad nativa, las diferencias de género y demás machangadas por mínima que sea. Cualquier cosa, cualquier mínima desigualdad es útil para justificar la colonización y evitar el sentimiento de culpa que comparten lo cristiano y lo postmoderno. Si los guanches eran injustos nada de lo que preocuparse, no hay culpa, no hay reivindicación necesaria… Así podemos aceptar sin culpa la cultura del colonizador, marginando y despreciando la cultura local ¡¡¡porque unos vestían con faldellines de junco y otros con faldellines de palmera y no todos iguales!!!!

... y así los progre-imbéciles le hacen el juego al colonialismo y al poder.



---------------------------------------------------------------------------------- ¡Gracias por leerme! Este blog y sus artículos están solamente respaldados por donaciones de los lectores, por lo que si disfrutaste de este artículo y consideras que la información te ha sido útil, puedes compartirlo, seguirme en Facebook, seguir mis comentarios en Twitter o hacer una donación en Patreon o Paypal.

Comentarios